Preguntas
Probablemente el mayor avance en los próximos años será la implementación clínica de diversos radiofármacos para PET/CT, con aplicaciones específicas para diagnosticar y elegir la mejor opción terapéutica para cada paciente. Esto va aparejado con el desarrollo de nuevas drogas para quimioterapia y nuevas técnicas de irradiación en radioterapia enfocadas en el costo/efectividad. Por ejemplo, se harán exámenes de Imágenes Moleculares que determinen el grado de generación de vasos sanguíneos (angiogénesis) para justificar el uso de drogas antiangiogénicas de alto costo. Tampoco escapan a estos criterios el uso de tratamientos con anticuerpos personalizados y terapia génicas. Algo similar ocurre en radioterapia al evaluar mediante moléculas radiactivas la capacidad de oxigenación de los tumores.
En el área del equipamiento médico, las imágenes fusionadas de PET con resonancia magnética (PET/MR) estarán disponible a nivel rutinario en corto tiempo.
Una de las características de esta enfermedad es que se depositan dos proteínas patológicas en el cerebro de los pacientes, una de ellas es la llamada beta-amiloide y la otra es la proteína tau. Hoy contamos con la posibilidad de detectar la existencia de estas sustancias con imágenes PET/CT, utilizando radiofármacos marcados con 18-flúor producidos en nuestro ciclotrón (PositronPharma). Estas imágenes están disponibles en nuestro centro, tanto para uso clínico como de investigación en la evaluación de nuevas terapias.
La Enfermedad de Alzheimer (EA) y Enfermedad de Parkinson han llegado a ser un serio problema mundial de salud, tanto en lo económico como en lo social, a medida que una población envejece. En EE. UU. se estima que uno de cada ocho norteamericanos sobre los 65 años padece de Enfermedad de Alzheimer (13%). Chile es el país con la mayor esperanza de vida en Latinoamérica alcanzando a 79.9 años para los hombres y 82.33 años para las mujeres, según cifras del Banco Mundial.
En general las demencias y trastornos del movimiento son difíciles de diagnosticar clínicamente y no es raro su confusión con otras enfermedades relacionadas. La Medicina Nuclear mediante las imágenes PET/CT, permite obtener un diagnóstico de mayor precisión en etapas más precoces. Ello es fundamental en la decisión terapéutica más adecuada para cada paciente.
• Melanoma en etapificación y seguimiento.
• Búsqueda de primario desconocido.
• LNH y LH en etapificación, control intraterapia y fin de tratamiento.
• Cáncer de mama en control de terapia.
• Cáncer colorrectal en etapificación y sospecha diseminación. Elevación de CEA.
• Cáncer pulmonar etapificación, especialmente para estadificación ganglionar y a distancia.
• Nódulo pulmonar solitario.
• Cáncer de esófago en etapificación.
• Cáncer cérvico-uterino localmente avanzado.
Hoy en día las dos grandes áreas de desarrollo de la Medicina Nuclear, son el uso en imágenes médicas para el diagnóstico y para el tratamiento de enfermedades principalmente oncológicas.
Con fines diagnósticos los pacientes reciben, habitualmente por vía venosa, partículas radiactivas de corta vida media en pequeñas cantidades que se fijan en los distintos órganos, fotografiadas mediante equipos detectores especiales, tales como gamma cámaras o los más sofisticados PET/CT. Para esto se emplea el mismo principio, pero con dosis mayores de radiación dirigidas a blancos específicos -como tumores- sin afectar órganos sanos.
La modalidad PET/CT se basa en la obtención mixta y simultánea, en un mismo equipo, de imágenes tridimensionales de cuerpo entero de una Tomografía por Emisión de Positrones (PET por su sigla en inglés), tras la inyección de un radiofármaco que se fija a nivel. El segundo componente CT (Computed Tomography) es un escáner convencional radiológico, que permite tener una referencia anatómica simultánea. La gran ventaja de PET/CT es que suma lo mejor de ambas modalidades de manera complementaria. La suma de PET + CT es muy superior al rendimiento de ambas tecnologías por separadas. Esto permite detectar tumores u otras patologías en un solo examen tridimensional y de cuerpo entero, con una mayor sensibilidad y especificidad, especialmente en cáncer.
El componente PET se basa en la administración de un radiofármaco marcado con radioisótopos emisores de positrones, obtenidos en nuestro ciclotrón (PositronPharma), que se administran por vía venosa sin riesgo de efectos secundarios y bajas dosis de radiación para el paciente. El radiofármaco más usado es la glucosa radioactiva unida a flúor-18 (18F-FDG), similar al azúcar, que se fija en los tumores por el mayor metabolismo de éstos y consumo de esta sustancia en comparación con los tejidos normales.
Una vez diagnosticado un cáncer o durante su seguimiento, los resultados de un examen PET/CT cambian el tratamiento en uno de cada tres pacientes, ya sea entre cirugías, quimioterapias, tratamiento médico, radioterapia, tratamientos mixtos. Esto implica un menor desgaste para el paciente y un importante ahorro en los recursos de salud que siempre son escasos.
La Medicina Nuclear tiene sus orígenes a fines de la Segunda Guerra Mundial, a partir del desarrollo de la energía nuclear. Tras su condenado uso bélico se hacía indispensable una aplicación pacífica de ésta en beneficio de la humanidad. Qué mejor que la medicina para crear el concepto de “átomo bueno”. Ello derivó en el uso de pequeñas cantidades de partículas radioactivas (átomos) para curar algunas enfermedades, especialmente tumores.
Tras más de setenta años de crecimiento de la especialidad, ésta se ha constituido en una importante herramienta para la medicina contemporánea, reconocida como especialidad médica en todo el mundo. Esto ha sido consecuencia especialmente de los avances tecnológicos en electrónica, computación física, química nuclear e, indudablemente, del avance de la medicina y conocimiento del cuerpo humano.